Es un trabajo corporal que nació en los Estados Unidos y que desde hace 5 años hace furor en Europa, principalmente en Italia y Alemania.
La rutina comienza con ejercicios de relajación y se desarrolla con música suave.
Con solo ver estas enormes esferas de 80, 90 y 110cm. de diámetro dan ganas de subirse e intentar hacer “la arañita”, estirándose de espaldas con los brazos hacia atrás, tocando el piso, o simplemente echarse a rodar.
Se trata de entregar el peso del cuerpo sobre la esfera, consiguiendo una relación entre el peso y el volumen favoreciendo el tono muscular.
Se utiliza esta técnica para mejorar problemas de postura, dolores de espalda, pinzamientos y todo lo que tenga que ver con contracturas y tensiones.
Como esferodinamia sirve para divertirse y relajarse.
Como esferoterapia, corrige, elonga, masajea todo el cuerpo, pudiendo practicarlo personas con problemas psicomotrices y respiratorios. Recomendado en asmáticos, ya que el estiramiento hacia atrás provoca apertura torácica, mejorando la respiración.
No tiene contraindicaciones, pero debe ser un trabajo dirigido y controlado por profesores capacitados, ya que provoca efectos muy profundos en el organismo y debe hacerse en su justa medida.
No hay edad para esta disciplina, la pueden realizar desde niños de 6 ó 7 años hasta la edad que cada uno se anime.

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